lunes, 16 de mayo de 2011

VIAJES



I

Después de tanto vuelo
y tanto cielo
al regresar
descubriste
que el presente
y el futuro
seguían
aguardándote
en el suelo.


II

Ya se me ha hundido todo el cielo
desarbolado la esperanza
helado el ansia codiciosa de tu roce

tan cerca de mí
que eras como mía

pero se acabó el trayecto
y hubo que apearse
¡pie a tierra!

y ya
distantes.



III

S’il y avait au moins sans qu’on puisse
l’atteindre une belle prairie verso ù aller.

(Si hubiese por lo menos sin que la pudiera
alcanzar una bella pradera hacia donde ir)
PIERRE RÉVERDY. Coin sous l’orage.
(‘Rincón bajo la tormenta’)



Y cuando me pregunte
qué hacer bajo esta nube
adónde dirigir mi pie que pisa
esta exacta porción de tierra
que no se abre en camino
o todavía no
como si el mundo
contemplara extrañado mi extrañeza
esperando a que yo me decidiese
por una u otra forma del vivir...

“¿Qué harás?”, parece que me gritan
la propia luz azul
y el puro verde y oro del paisaje.
“¿Hiciste la maleta?”


Porque solos, desnudos
se aventuran los hombres
que saben que aun perdiendo
estaban obligados al viaje.
“¿Y qué quieres dejar?”, me apremian.

A donde vaya iré
para poder marcharme.